Los estampados gráficos (también conocidos como patterns), ya sean sobre tela, papel o incluso plástico son una forma atemporal de aplicar la ilustración sobre objetos, productos y prendas de ropa.

Por si no lo sabíais, un estampado es cualquier imagen trasladada al papel u otros materiales a través de distintos métodos. Antes se solían usar láminas de madera o bronce y hoy la mayoría de estampaciones son digitales.
La estampación, por ejemplo, aplicada sobre las fibras textiles, viene dándose desde hace cientos de años en países como la India o Bali, donde continúan utilizando su antigua técnica a partir de sellos para realizar verdaderas preciosidades sobre manteles, sábanas, batiks y pañuelos.

Esta técnica centenaria permitía crear composiciones de varios colores planos, a partir de un sello que iban aplicando una y otra vez creando un patrón repetitivo, normalmente combinando dos o tres de estos. Ahora, gracias a técnicas digitales las posibilidades son casi infinitas en cuanto a color y texturas.
Lo cierto es que hoy estamos viviendo un verdadero auge de los patterns ilustrados.
En Instagram hay miles de cuentas de diseñadores que se dedican en exclusiva a crear estampados, aunque para mi gusto la mayoría de éstos abusan de la vectorización y de la falta de originalidad.
Y es que como en todo, ser creativo y separarse de la competencia es difícil, pero se puede.
Un ejemplo de ello es la mítica marca española Gastón Y Daniela de telas y papeles pintados. Mi primer contacto con la marca bilbaína fueron las cortinas de la cocina de mi casa que mi madre hizo con una preciosa tela de insectos y frutas (que por cierto a día de hoy siguen produciendo). Creo que esta tela fue clave en cierto modo a mi origen como ilustradora y a mi amor por los estampados.
Como artista que soy prefiero todos aquellos diseños que se note cierta artesanía. Que se aprecie la mano de su creador, las texturas de los materiales utilizados, cierta porosidad y líneas imperfectas.
Por suerte hay pequeñas marcas que gracias a tener una producción pequeña pueden permitirse invertir en un diseño de mayor calidad a mano de artistas y una aplicación con mimo de los estampados.
Trabajando así tenemos a la marca inglesa Desmond&Dempsey, que se dedican exclusivamente a hacer pijamas de lujo (el pijama no baja de las 150 libras).

Con el patrón clásico de toda la vida, actualizan este diseño camisero con unos estampados fresquísimos y muy originales de tigres, palmeras y otras formas orgánicas, además de que su imagen gráfica me parece deliciosamente inspiradora.
Lo mismo sucede con la marca estadounidense Printfresh, dedicada a hacer estampados sobre ropa de hogar y prendas. Comparten parte de su proceso creativo manual en su Instagram y el resultado final sobre sus productos. Tienen una clara inspiración hindú y por eso tienen unos diseños llenos de colores brillantes.

Por mi parte como profesional, he tenido la suerte de hacer un encargo para una pequeña marca australiana llamada Tanouk para realizar un pattern de leopardos de colores que luego la marca utilizó sobre sus vestidos y camisas.

El diseño de estampados es una de mis aplicaciones favoritas para la ilustración, y mis predilectos son aquellos de inspiración oriental y animal. ¿Qué mejor manera hay de llevar arte encima?